En estos días tiene mucho sentido pensar en la educación como una inversión o fuente de oportunidades, pues estar preparados para las oportunidades como los retos laborales de la actualidad y del futuro nos asegurarán la estabilidad de nuestras finanzas personales y estabilidad familiar. Pensar en la educación de nuestros hijos, es asegurar mejores oportunidades laborales y mejor calidad de vida, proyectar una inversión a largo plazo que puede resultar redituable.
Por lo que elegir una opción educativa que contemple calidad a buen precio debe ser una decisión analizada con tiempo.
También es posible garantizar los estudios de la preparatoria, universitarios o bien una maestría de nuestros hijos mediante varias opciones, entre ellas, un fondo de ahorro educativo, o un financiamiento propio.
Cada una de estas opciones, más que representar un gasto, debe considerarse como una inversión, pues brinda a nuestros hijos la posibilidad de una estabilidad económica, e incrementar su patrimonio, con la finalidad de ejercer una profesión y brindarles una buena calidad de vida.
Si planea realizar un ahorro durante cierto periodo con la finalidad de asegurar que su hijo (a) pueda solventar sus estudios; felicidades, pero debes de considerar Ciertos puntos, puede ser mediante una cuenta de ahorros (financiamiento propio), pero no tendrá los mismos beneficios que un programa bien proyectado, es más recomendable que contrate una fondo de ahorro educativo inbursa que funciona como cualquier otro seguro de vida, porque garantiza cierta cantidad a pagar a los padres o tutores o bien a los hijos cuando estos sean mayores de edad, y cuentan con coberturas añadidas como fallecimiento del padre.
De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros, estas pólizas funcionan mediante una suma pactada durante varios años, al final del plazo, la compañía le entregará la cantidad que se fijó, o bien, en caso de su fallecimiento, su hijo reciba todos los recursos (suma asegurada), sin la necesidad de cubrir una mensualidad.
Los plazos suelen ser por lo general de más de 10 años, para que el cliente reúna una suma importante de recursos y ésta se entregue cuando el hijo inicie sus estudios profesionales y hasta concluirlos.
La Condusef afirma que ésta póliza posee mayores beneficios que una cuenta de ahorro, pues con una cuenta de ahorro se corre el riesgo de que, en caso de fallecimiento, no hayan reunido la cantidad necesaria para cubrir los gastos educativos de sus hijos.
Es recomendable empezar con antelación (con tiempo) pues entre más crezcan los hijos, se tendrán menos años para ahorrar. Con gusto le indicare cual es el mejor plan para la educación de tu mayor tesoro- su hijo- recuerde que puede ahorra desde 400 pesos al mes o 2000 pesos al año acerquese con gustó le atenderé.
Reciba un cordial saludo
Ing.Jaime Campos Rodríguez
Cel 449 216 18 45
jaimecamposrodriguez@gmail.com
Especialista en Programa de ahorro educativo
